extraterrestres

¿Qué debemos pensar de los seres extraterrestres?

Pregunta:

¿Hay seres extraterrestres o no los hay? ¿Qué hay de verdad en esto? ¿Cambiaría nuestra fe?

Respuesta:

Estimado:

Sobre este tema Dios nada nos ha dicho. Por tanto, nada podemos saber; al menos, por el momento. ¿Puede haber otros seres en este universo? Sí, puede. ¿Los hay? No lo sabemos.

Como dice el Padre Jorge Loring, gran apologista, “la existencia de la vida inteligente extraterrestre es algo probable que no ofrece ninguna dificultad, ni a la Ciencia ni a la Religión. Pero, a pesar de todos los esfuerzos realizados, los científicos no han logrado captar ninguna señal clara de seres inteligentes extraterrestres”.

De todos modos, no hay que creer, como algunos medios informativos difunden equívocamente, que el mundo científico se inclina por la existencia de tales seres. Por ejemplo, el profesor Heinrich K. Erben de la Universidad de Bonn, reduce drásticamente la posibilidad de vida inteligente en algún otro lugar del Universo[1]. El profesor Manuel Carreira declaraba hace años: “No tenemos datos sobre la existencia de vida inteligente fuera del sistema solar. Pero es verdad que la opinión científica ha evolucionado en los últimos veinte años en el sentido de considerar cada vez más difícil el que se haya dado en otros lugares el conjunto de condiciones que se dieron en nuestro planeta, y que influyeron decisivamente en la habitabilidad y en el desarrollo de la vida hasta el hombre”[2]. Y también: “La opinión científica sobre la vida extraterrestre ha cambiado en los últimos diez o veinte años. De un optimismo que esperaba encontrar planetas habitados en todo el Universo, casi alrededor de cada estrella, a un realismo más bien pesimista. Parece difícil esperar que se hayan dado en otro sitio todas las condiciones, en el momento preciso y en la forma precisa, para que aparezca la vida y tenga la posibilidad de desarrollarse hasta donde se desarrolló aquí en la Tierra”[3].

“El paleontólogo Peter Ward y el astrónomo Donald Brownlee –dice también el P. Loring– han examinado los procesos químicos por los que se pudo originar la vida en la Tierra, y los factores ambientales que protegieron este planeta y que crearon las condiciones para que esa vida evolucione a formas complejas, algo raro en el universo. (…) . La Tierra es un planeta tan raro que no se parece a ningún otro cuerpo espacial. Condiciones para que la vida se haga más compleja: distancia adecuada al Sol para que el agua se mantenga líquida; masa adecuada del planeta para retener la atmósfera y los océanos, un vecino masivo como el planeta Júpiter que nos salva de los asteroides más peligrosos, la justa cantidad de carbono que permita el desarrollo de la vida, etc. Demasiadas casualidades para ser optimista”[4].

Según el astrónomo chileno Patricio Díaz Pazos, la probabilidad de vida extraterrestre es de: 0, 000 000 000 000 000 000 000 000 000 000 000 000 1 “como requisito para la existencia de algún tipo de ser viviente, en las circunstancias que conocemos”[5].

A estos datos me remito.

Bibliografía, Jorge Loring SJ, Para salvarte, 56ª edición, n.1,3 (ver la bibliografía que cita allí el autor).

[1] Diario YA de Madrid, 6-I-86, pg. 6. Citado por Loring.

[2] Manuel Carreira, S.I., Profesor de Física y Astronomía en la Universidad de Cleveland (EE.UU.), Metafísica de la materia, IX. Universidad de Comillas. Madrid. 1993. Citado por Loring.

[3] Ibid, Antropocentrismo científico y religioso. Ed. A.D.U.E., Madrid, 1983. Siempre citado por Loring.

[4] Diario LA RAZÓN, 20-I-2000, pg.36.

[5] Patricio Díaz Pazos: en Internet, www.astrocosmo.cl/astrofis/astrofis-01_11.htm.

¿Qué posición tiene la Iglesia católica respecto de la existencia de otras razas y especies en nuestra galaxia?

Pregunta:

¿Qué posición tiene la Iglesia católica respecto de la existencia de otras razas y especies en nuestra galaxia?

 

Respuesta:

La Iglesia no se ha pronunciado sobre este tema. No se trata de un problema de fe sino de ciencia. Dios no nos ha revelado nada a propósito; o bien porque no hay vida inteligente en otros planetas, o bien porque habiéndola no nos afecta saberlo o ignorarlo para nuestra salvación; o bien porque con los principios revelados que ya tenemos podemos iluminar su misterio (creación, libertad, pecado original, redención) si alguna vez llegamos a conocer tales seres.

Por otro lado, se trata de una de las cuestiones más ociosas, más mal usadas y que produce en muchos casos auténticos despistes mentales entre los seres inteligentes de nuestro propio planeta. Un inmenso sector de los aficionados a los fenómenos extraterrestres son embaucadores y cazabobos; y otro importante grupo lo componen personas con graves delirios psíquicos y fundadores de sectas apocalípticas y suicidas.

Mientras tanto la vida en nuestro planeta sigue ofreciéndonos espectáculos sorprendentes (tanto de horror como de bondad) que pasan desapercibidos a los cazadores de mundos metagalácticos.

P. Miguel A. Fuentes, IVE